Título de vanguardia.com - 16/10/2024 13:30:08

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Influenza B: los síntomas del virus que mató a la niña Juanita en …

La influenza B, un subtipo del virus de la gripe, ha vuelto a encender las alarmas en Argentina tras la trágica muerte de Juanita, una niña de 13 años en la provincia de Misiones. Este virus, menos conocido que la influenza A pero igualmente peligroso, ha generado preocupación entre especialistas y la población, recordando que puede ser letal, especialmente en personas vulnerables, como niños, adultos mayores y aquellos con condiciones de salud preexistentes. Lea también: Jorge Alfredo Vargas confirmó muerte de reconocida periodista: ¿quién es? El caso de Juanita ha sacudido a su comunidad y ha reavivado el debate sobre la prevención y el tratamiento de la influenza B, una cepa que, aunque suele tener una menor tasa de infección, puede provocar cuadros graves, e incluso fatales, como en esta ocasión. La influenza B es una de las principales variantes del virus de la gripe que circula cada año, afectando principalmente a los seres humanos. A diferencia de la influenza A, que puede contagiar tanto a humanos como a animales y generar pandemias, la influenza B se limita a los humanos y se propaga de forma estacional. Sin embargo, esto no la hace menos peligrosa. Este virus, que es más común durante los meses de invierno, se transmite a través de pequeñas gotas de saliva que se expulsan al toser, estornudar o hablar. También puede propagarse por contacto con superficies contaminadas, lo que facilita su rápida expansión en entornos cerrados como escuelas y oficinas. Aunque las tasas de infección de la influenza B suelen ser más bajas que las de otros tipos de influenza, los casos que surgen pueden derivar en complicaciones graves. Los síntomas de la influenza B suelen aparecer de manera repentina y se confunden fácilmente con los de un resfriado común o incluso con los de la influenza A. Lea también: Jorge Rausch se sometió a procedimiento médico por complicaciones de salud La mayoría de las personas infectadas experimentan fiebre superior a los 38 grados Celsius, acompañada de escalofríos y sudoración excesiva. Esta fiebre puede durar varios días y, en algunos casos, es tan severa que se necesita tratamiento médico para controlar la temperatura. La tos seca y el dolor de garganta son síntomas persistentes que empeoran con el paso de los días. La tos puede intensificarse, provocando irritación en el pecho y dificultad para respirar en casos graves. El cuerpo reacciona ante la infección viral con una sensación de agotamiento extremo, acompañado de dolores musculares y articulares. Estos dolores son tan intensos que muchas personas no pueden realizar sus actividades cotidianas. Aunque menos comunes que otros síntomas, la congestión nasal y los dolores de cabeza suelen acompañar a la gripe, complicando la respiración y afectando el bienestar general de la persona infectada. En algunos casos, especialmente en niños, la influenza B puede causar síntomas como náuseas, vómitos o diarrea, lo que puede llevar a una deshidratación rápida si no se trata adecuadamente. Juanita, una niña de 13 años de la provincia de Misiones, comenzó a presentar algunos de estos síntomas días antes de su fallecimiento. Lo que inicialmente parecía una gripe común pronto se transformó en un cuadro severo que llevó a su familia a buscar atención médica. A pesar de los esfuerzos de los profesionales de la salud, Juanita no pudo superar la infección, falleciendo debido a complicaciones causadas por la influenza B. Lea también: Millonarias pérdidas: esto fue lo que se llevaron los ladrones que se metieron a la casa de Lucas Arnau Este trágico caso ha causado conmoción en la comunidad local y ha puesto de manifiesto la necesidad de estar atentos a los síntomas de la influenza, especialmente en grupos de riesgo como los niños. Aunque el tipo B del virus tiene una tasa de infección menor que otras variantes, su capacidad para desencadenar complicaciones graves es una realidad que no debe ignorarse. La influenza B puede desencadenar complicaciones graves, especialmente en niños, adultos mayores, mujeres embarazadas y personas con condiciones crónicas, como el asma, la diabetes o enfermedades cardíacas. Entre las complicaciones más comunes se encuentran la neumonía, la bronquitis, infecciones del oído e incluso el empeoramiento de enfermedades preexistentes. En casos severos, como el de Juanita, la influenza B puede causar una falla multiorgánica, lo que ocurre cuando varios sistemas del cuerpo dejan de funcionar debido a la respuesta inflamatoria que genera el virus. El caso de Juanita resalta la importancia de la vacunación anual contra la gripe, que es una de las principales herramientas para prevenir infecciones graves por influenza B. Aunque la vacuna no garantiza una protección completa, puede reducir significativamente la severidad de la enfermedad y evitar complicaciones potencialmente mortales. Además de la vacunación, se recomienda mantener buenas prácticas de higiene, como lavarse las manos con frecuencia, evitar el contacto cercano con personas enfermas y cubrirse la boca al toser o estornudar. En caso de presentar síntomas de influenza, es fundamental acudir al médico y, si es necesario, recibir tratamiento antiviral para acortar la duración de la enfermedad y disminuir el riesgo de complicaciones graves.

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