WASHINGTON.- Desde la semana pasada, un combo de noticias económicas de distinta índole empezó a generar algunos ruidos sobre la Argentina en el exterior.
Empezó con el rojo de un número clave, el déficit externo, que superó los US$5000 millones; siguió con las advertencias de un informe del influyente banco de inversión JP Morgan, que modificó su recomendación para los activos argentinos; siguió con el fallo adverso por YPF en Nueva York; con la indefinición del Fondo Monetario Internacional (FMI) sobre un nuevo desembolso, de US$2000 millones, y cerró con subas acumuladas semanales de 55 pesos en la cotización del dólar, a su valor nominal más alto jamás registrado.
Todo, en un contexto preelectoral que se recalienta de cara a octubre..