La Corte Suprema envía señales negativas ante la posibilidad de que el Gobierno nombre jueces por decreto
En medio del cruce de mensajes entre el Gobierno, el Congreso y la Justicia, la Corte Suprema reflotó esta semana antecedentes que siembran dudas acerca de si efectivamente les tomará juramento a Ariel Lijo y al académico Manuel García-Mansilla como nuevos jueces del máximo tribunal, si es que el presidente Javier Milei los nombra por decreto en comisión por un año. Y envió señales de su interés en opinar sobre el futuro del máximo tribunal, en vez de solo presenciar la negociación.