La clave: el color del calamar. Crean una tela capaz de cambiar de estructura para abrigarnos o refrescarnosPor Augusto Finocchiaro Preci
La temperatura de Buenos Aires en estos días primaverales, parece aleatoria. Uno puede salir a trabajar con frío, abrigado para no enfermarnos con la baja temperatura matinal, y de golpe, a la hora de salir a comer, se encuentra con un sol pleno digno de bermudas o pollera, y perfecto para tomar algo fresquito al sol.