Título de Infobae - 14/10/2024 02:30:11

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A 15 años del exabrupto más emblemático de Maradona tras clasificar al Mundial 2010: el detrás de escenaLuego de caminar por la cornisa la tarde de la lluvia bíblica y el gol milagroso de Palermo ante Perú, la Albiceleste derrotó a Uruguay en Montevideo y Diego escupió venganza a cada paso. Los entretelones del abrazo con Bilardo y de un ciclo a puro vértigo

Maradona temía manchar su póster. Sentía que ponía en juego la corona, el respeto, parte del cariño del hincha. Todo podía pasar en la noche del Centenario. Ese Uruguay-Argentina significaba clasificarse al Mundial 2010 con él como entrenador o el vacío más profundo. El destino ya le había regalado una ficha unos días antes. En el partido con Perú, en el Monumental, durante un rato Argentina se había quedado sin pasajes a Sudáfrica. El empate, después del primer gol del Pipita Higuaín que casi nadie recuerda, lo dejaba afuera. En ese instante de película, en medio de una lluvia despiadada que nadie sufrió porque el pánico era más fuerte, apareció Palermo para un festejo de gol que fue la tapa de su libro. Diego se tiró a chapotear en el agua como un chico feliz. Ahora había que replicar esa épica de visitante. Fue un partido donde el talento y la imaginación quedaron rehenes de los nervios. El miedo a perder algo grande es demoledor. Recién a los 39 minutos del segundo tiempo, de una jugada sucia, imperfecta, llegó la primera liberación.

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