NUEVA YORK.- En su mansión Mar-a-Lago, el jueves por la noche, el expresidente Donald Trump todavía estaba asimilando la noticia de su acusación, según varias personas cercanas a él. Trump y sus asesores fueron sorprendidos con la guardia baja, ya que creían que cualquier acción por parte del gran jurado estaba todavía a semanas de distancia y podría no ocurrir en absoluto.